Hoy en día en nuestro Estado, en el cual anteriormente reinaba la protección y el respeto hacia nuestras mujeres, se encuentra arraigada una ola de violencia extrema de género, viviendo una reacción negativa hacia la mujer, ya sea por su autonomía personal e independencia, dentro de su circulo familiar y la mas temeraria el secuestro, violación y muerte, por el crimen, en todos sus niveles de organización delictiva.
En los últimos seis meses, ha habido 42 feminicidios , y de los cuales 24 fueron contra mujeres de 20 años o menos, y esos son los registrados, ya que muchos no han salido a la luz pública, y sus desapariciones aun se encuentran en el limbo, tras el velo del crimen organizado y sus políticos agremiados, con su falta de investigación adecuada y su seguimiento.
Es de todos sabido que para secuestrar mujeres utilizan los ecotaxis piratas, como principal medio de operaciones, los cuales se desplazan por nuestro estado con libre camino, sin nadie que los investigue…
En muchos casos, aunque no lo diga nadie, es sabido que las raptadas son llevadas posteriormente en otros medios de transporte, a otros estados y de ahí tras fronteras a su fatal final.
Urge que los encargados de la prevención inmediatamente pongan en funciones una suerte de “Alerta de Género”, o como quieran llamarla.
Claro, urge también una concientización ciudadana de esta violencia sin voz, que cubre nuestro Estado, incluyendo los legisladores locales que modifiquen las leyes para ser mas precisas y expeditas, así como una amplia capacitación y adiestramiento a los organismos de protección ciudadana, con un enfoque directo hacia la seguridad de la mujer.
