Ya no se sabe si llorar o reír con lo que sucede en los servicios médicos de la Sección 50 y es que si no es la escasez de medicamento, es la falta de aparatos o el cobro del estacionamiento y tantas cosas más.
Pero la novedad es que ahora sucedió algo que raya en la ficción, por demás ridículo, que evidencia la falta de sensibilidad y la capacidad de la gente de llegar a acuerdos que pongan en funcionamiento real la clínica y módulos de atención de la Sección 50.
Resulta que el lunes de la semana pasada se descompusieron los climas del laboratorio, situación que según fuentes de la raza que trabaja en los pasillos de la clínica hospital, se reportó en su momento al jefe de mantenimiento, Gerardo Mireles y a Martha de León, presidenta de los servicios médicos.
La cosa es que no se repararon los climas y esto ocasionó que se descompusieran algunos aparatos, entre ellos un refrigerador que conservaba la sangre, dicha situación provocó la alarma y el jueves decidieron pedir prestado un refrigerador de Coca Cola a un restaurante que se encuentra frente a la clínica, lo metieron al laboratorio y guardaron ahí la sangre para conservarla.
Sí, lo lee usted bien, ¡en un refri de Coca Cola tienen la sangre del laboratorio de la clínica hospital! Cabe destacar que la los diversos procesos que se pueden hacer con la sangre humana requieren de temperaturas que van desde los -2º C hasta los -80º C y un refrigerador comercial para vender refrescos difícilmente llega a tales temperaturas.
Luego el director de la clínica Alan “Dr. House” Segovia se puso las pilas y mandó comprar climas y pedir el refrigerador que hacía falta, pero qué cree estimado lector, que la madrugada del viernes llegó Gerardo Mireles y reparó los climas, cuando previamente dijo que ya no tenían compostura.
Se dice que al cuestionar a Mireles sobre el por qué no reparo antes los climas y evitar tanto alboroto, este contesto que Martha de León le dio la indicación directa de esperar su señal para meter mano a las cosas, pero otras versiones señalan a Gerardo como gente de Vaquera, entonces ¿quién daría la orden?
Mientras son peras o son manzanas y esta gente se sigue peleando por las migajas del poder, la raza sigue padeciendo su servicio medico. Ya es hora de ponerse las pilas…
Y por favor, no usen esa sangre, ya hasta fritada se puede hacer con ella.
Saludos.
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