Lo que comenzó como un sueño, de dar trabajo a quienes se encuentran privados de su libertad, se transformó en un ideal que compartieron muchas personas a lo largo de cuatro años y hoy es una realidad: el Centro de Reinserción Social El Castillo, en Mazatlán, Sinaloa cuenta con un moderno taller productivo que brinda trabajo digno.
Agustín Frías, el hombre que cree en Dios y práctica la fe del amor incondicional ha logrado sembrar en los corazones de muchos que lo conocen, la confianza en una segunda oportunidad. Así lo demuestran las 300 personas que han transitado por los talleres de carpintería y recuperaron su libertad con una mentalidad diferente a la que tenían al ingresar, y ninguno ha vuelto al penal.
Ese espíritu perseverante de Agustín Frías lo llevó a dar clases de inglés en el CERESO y consejería cristiana. Al darse cuenta de que el trabajo dignifica a la persona, buscó la forma de elevar la escala y un día, ocurrió una “diosincacia”: el empresario Luis Granados buscaba costureras para su taller y le dijo a su esposa que lo anunciara en un grupo de chats donde Agustín es miembro. Se contactaron y le dijo que él tenía todos los costureros que necesitara. Ahí comenzó a cristalizar el proyecto que hoy las autoridades penitenciarias inauguraron el taller de costura.
El moderno taller productivo, aun antes de su inauguración, ya es noticia que ha trascendido las fronteras del Estado. Hace 20 días vinieron empresarios mexicanos y estadounidenses radicados en Baja California Sur para replicar este modelo y emplearlo en el CERESO de La Paz. El potencial del trabajo como herramienta que dignifica al hombre es mayor de lo que usualmente se piensa.
Nuestra Carta Magna lo establece en su artículo 18 y los tratados internacionales obligan al Estado Mexicano a cumplir con el derecho humano a la reinserción social a través del trabajo, la capacitación para el mismo, el deporte, la educación y la salud como ejes primordiales. Hoy se puede afirmar que se dio un paso importante en ese sentido y se busca que el ejemplo se reproduzca en los demás CERESOS de Sinaloa por lo que trascendió que el Gobernador Quirino Ordaz Coppel ya giró instrucciones de continuar con este proyecto y se anunció el inicio de Preparatoria abierta gratuita para los centros penitenciarios.
La lluvia de bendiciones, diría Agustín Frías, sigue mojando la tierra fértil del trabajo digno y honesto de las personas privadas de su libertad y del equipo de colaboradores a través de la sociedad civil Alpha Jn317 que sigue invitando a empresarios para que se sumen a este gran proyecto de reinserción social.
