Cualquier hecho delictivo es reprobable en todas las sociedades de la actualidad, pero desde cuando se han vuelto invisibles los delitos políticos, aquellos que afectan a todos los ciudadanos que conformen una sociedad.
Los sucesos ocurridos en Culiacán son considerados por muchos como la gota que ha derramado el vaso y han extinguido la poca confianza que quedaba en la 4T (si es que en algún momento alguien seguía teniéndoles confianza) pero después de ver lo ocurrido y el maravilloso desfile de pretextos, camiones volcados de periodistas, comparaciones evangélicas con políticas sociales. La frecuencia y tenacidad de tantos errores solo deja claro que la prioridad de la administración federal es no solo crear una división en la sociedad mexicana, sino el crear una inestabilidad nacional y un claro debilitamiento de las instituciones publicas, pero con que fin; quien será el beneficiado de todo este caos resultante. Esa es la verdadera pregunta, quisiera dar el beneficio de la duda y seguir creyendo que el Mesías no seria capaz de vender a su patria por un beneficio oculto. Pero al ver como cobardemente vendió al coronel para salvar su pellejo que mas podemos esperar. Digo o que será lo próximo que dirá “que el nunca se entero del operativo y que por eso fue todo el caos………” perdón me dice la producción que ya lo dijo antier, cual será la próxima galimatías del “presindejo”.