No es nada nuevo que se diga que Aldo Fasci Zuazua es un tipo que no tiene pelos en la lengua y no le tiemblan las corvas para poner los puntos sobre las íes en el tema que mejor maneja, que es el de los asuntos delincuenciales, sus causas y sus consecuencias.
Fasci aprovecha para anunciar la presentación de su libro “Todos Somos el Asesino”, evento que se celebrará el próximo 9 de octubre en la Feria Internacional del Libro de Monterrey 2023.
En su obra Fasci desnuda el tráfico de armamento ruso que llega a los Estados Unidos y luego a México, la situación actual de la delincuencia en el país, las formas en que las autoridades se han enfrentado al crimen organizado, el fenómeno del fentanilo que viene de China y muchos más.
Y es ahí donde explica por qué “Todos Somos el Asesino”…
Y en una entrevista que no tuvo desperdicio que le concedió Luis Padua, el director del periódico El Horizonte, el ex secretario de Seguridad y ex Sub Procurador denunció la culpabilidad por omisión que cometen los empresarios mexicanos quienes pichicatean los sueldos a sus empleados, quienes muchas veces se ven orillados a trabajar para el crimen organizado.
Pero igualmente Fasci Zuazua acusó que el mismo crimen organizado es el principal empleador para Estados Unidos.
“Sin darse cuenta los indocumentados son acomodados principalmente por el crimen organizado, quienes son los que les ayudan a pasar a Estados Unidos” ya que es el mismo CO el que controla el tráfico de la inmigración ilegal.
“Todo mundo necesita mano de obra barata y no nos damos cuenta que algún empresario los contrata o un comerciante y que el crimen organizado es la agencia de colocaciones, sin darnos cuenta” denuncia Aldo.
Aldo recuerda sus entrevistas con migrantes rescatados de naciones como Venezuela, Brasil, o cubanos, quienes pagan cuotas a partir de los mil 500 dólares por persona a los polleros, y quienes le aclararon a Aldo que el servicio que reciben de parte de los traficantes “es completo”: “Pagamos porque nos van a llevar hasta algún estado del norte, nos van a dar casa, nos van a dar papeles falsos y trabajo, sino no pagaba”.
En cuanto a su libro, “Todos Somos el Asesino”, el abogado dice que solamente plasmó “todo el conocimiento y diagnóstico adquirido en más de 20 años de carrera en seguridad pública y asesor en instituciones privadas”.
Aldo advierte que para enfrentar la delincuencia hay que conocer cómo son sus operaciones financieras y en ese punto acusó que las empresas mexicanas contribuyen con la inseguridad al pagarles poco a sus empleados a quienes obligan a trabajar para los delincuentes en busca de completar sus ingresos.
Peor aun: Aldo visualiza que entre las remesas que tanto se celebra se reciben en México podría haber una revoltura con dinero producto de algún ilícito.
“México recibe entre $40 y $50,000 millones de dólares al año por remesas, pero eso pasa en todo el mundo, ¿Cuántos nacieron de un ilícito que cruzaron la frontera ilegalmente y consiguieron empleo ilegalmente?” se pregunta el abogado.
