El reciente encarcelamiento de un marrullero exalcalde de Felipe Carrillo Puerto a un paso de ser candidato del PRD en ese municipio de la zona maya, mostró el eterno vicio de la justicia utilizada como “santo remedio” para dejar fuera de combate a los enemigos que son una amenaza electoral.
“El Chak Meex” José Esquivel Vargas detonó nerviosismo de la Cuatroté, por lo que fue detenido y enviado al humillante Cereso de Chetumal que se cansó de esperar a cinco o seis funcionarios del incómodo exgobernador amigo Carlos Joaquín González, embajador en Canadá por el poderoso dedo del Presidente Andrés Manuel.
Y llama la atención que “El Chak Meex” sea el único exalcalde reciente que es convertido en presidiario, porque otros traviesos no son candidatos en el bando enemigo o juegan en el equipo 4T, como el alcalde de Bacalar, “Chepe” Contreras Méndez, quien ocupando la silla abandonó al PRI para vestir la casaca de Morena e ir por la reelección.
En cambio el exalcalde perredista de Felipe Carrillo Puerto fue procesado por una maniobra de uso común entre nuestros políticos, ya que la alcaldesa morenista Mary Hernández Solís lo acusa de simular dos sesiones de Cabildo (en 2019 y 2020) para autorizar a sus integrantes la entrega de bonos de fin de año por dos millones 600 mil pesos.
La debilitada Mary Hernández iba a chocar con “Chak Meex”, pero con velocidad felina su denuncia fue tomada muy en serio por la Fiscalía General y sus muchachitos lo aprehendieron cuando salía de su hotel poco después del mediodía, una vez concluido su encuentro con líderes mayas para afilar estrategia.
El operativo fue captado por una oportuna cámara de vigilancia instalada en el sitio a una altura precisa, para no perder el mínimo detalle del acontecimiento y difundirlo de inmediato en redes sociales con la consigna de “quemarlo”.
El pasado martes el Juez de Control lo vinculó a proceso y le impuso la medida cautelar de prisión preventiva domiciliaria, mientras dure el proceso. El castigado “Chak Meex” ya no quiso saber de su candidatura y anunció su renuncia con una carta enviada a la dirigencia nacional del PRD y al Instituto Electoral de Quintana Roo.
Es muy complicado que la Fiscalía vaya por otro inminente candidato porque su zarpazo fue muy descarado y todo mundo olfateó el nervio del grandulón del barrio, ya que la Cuatroté es amplia favorita en Felipe Carrillo Puerto pese al rechazo cosechado volquete por su frívola e incompetente alcaldesa Mary Hernández.
El mensaje tiene doble filo, porque la Fiscalía ya fue utilizada para sacar de la competencia a un enemigo apenas peligroso y queda en modo vigilante, pero también deja al descubierto los sorprendentes nervios de la 4T que va por el juego perfecto, sin que tenga en su escenario perder una sola posición local o federal en juego.
