Los relojes giran a la derecha, o en sentido horario, debido a una convención que se remonta a los relojes de sol en el hemisferio norte.
La sombra en un reloj de sol se mueve de izquierda a derecha a lo largo del día en esta región, lo que refleja el movimiento aparente del sol en el cielo.
Cuando se desarrollaron los primeros relojes mecánicos, siguieron esta misma dirección para mantener la consistencia con la lectura del tiempo establecida por los relojes de sol.
Así las cosas… ¡Excelente martes!