Nuevo León está envuelto en su propio huracán, un huracán político que tiene al estado en una incertidumbre que solo en los próximos dos meses sabremos qué rumbo va a tomar.
Primero por que pesa, como una “espada de Damocles” el amago de un juicio político en contra del gobernador Samuel García que la Corte de la Nación avaló y que el Congreso del Estado lleva el proceso, y segundo porque recientemente el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación concluyó que el mismo gobernador usó recursos públicos para apoyar la campaña del candidato presidencial Jorge Álvarez Máynez.
Por más amparos, suspensiones y recursos que esté interponiendo García, al arrastre de presuntas ilegalidades que ha cometido en los tres años de gobierno no le borra la cara de preocupación que en los últimos días se le ha visto en los videos y fotografías en los que aparece de eventos que tiene.
Por si fuera poco, que no son asuntos menores que dan inestabilidad política al estado, también avanza el juicio político contra el secretario de Gobierno Javier Navarro y al paso de los días se acrecientan las voces al interior del Palacio de la salida de más funcionarios, además procesos penales a funcionarios…
Sexenios atrás se decían que eran ajustes de gabinete, hoy hasta los empleados y servidores públicos ven desgajamiento gubernamental, tales lluvias tupidas que cayeran en el Palacio de Cantera.
Resulta que lo nuevo ya no es emocionante, ni apasionante, ni mucho menos brillante, ni los recursos federales supuestamente prometidos han llegado para enfrentar los daños de “Alberto”, resulta que lo nuevo sí, sí se desmorona y no parece que vaya hacia adelante.
Soy Araceli Garza y lo invito a que nos visite en nuestra página www.15segundosmx.com o a que nos lea y escuche también en ScriptaMTY y Radio Fórmula Mty.