Desde el noviazgo… Si las personas supieran lo importante que es la confianza en uno mismo, la seguridad personal y la autoestima, quizá no habría tantos matrimonios fallidos.
Toda persona sana emocionalmente sabe poner un alto al maltrato, para empezar no se relaciona con un maltratador (hombre o mujer), identifica situaciones que la colocan en un punto vulnerable, que la tratan de manipular y con su autoestima en alto, dice ADIOS.
La persona sana emocionalmente, sí hay violencia en el prospecto de pareja, sabe que no es su culpa que la relación falle, sabe que para que una pareja funcione se necesitan dos entes completos que estén comprometidos en hacer que el proyecto de pareja-familia funcione, que no importa uno más que el otro, que no vale la cantidad de dinero que aporte cada uno para que su voto u opinión cuente más que la del otro, sabe que no se vale proyectar las broncas del trabajo, de la familia incluso de las parejas previas en la relación actual, sabe que no porque se repitan mentiras una y otra vez se convertirán en verdad.
Una persona sana emocionalmente cuando ama, no condiciona, no genera dolor emocional y menos físico, no etiqueta, no supone, no manipula, no sataniza ni se burla de los errores cometidos, no genera inestabilidad emocional, no pretende que el otro pierda la autoestima, no controla ni a través del sexo, ni del dinero, no obliga a tener relaciones, ni chantajea con irse con otr@, no genera dudas, ni culpas, no trata de cobrar venganza en la pareja y menos descarga sus frustraciones del día en ell@, no te encierra en un círculo, no te prohíbe contactos con amistades y familia, no minimiza las aportaciones a la relación, ya sean en tiempo, dinero o actividades en el hogar, no miente, no vigila, no espía, no anda checando a qué horas entras, sales o que cosas tienes que hacer, ni donde ni con quien. No revisa las carteras ni los celulares, o correos, no te obliga a hacer cosas que van en contra de tus valores o creencias. No se queda con tu dinero, tu tarjeta de nómina ni te deja con lo mínimo para tus traslados y comidas. No te prohíbe que te diviertas, ni te critica porque lo haces, no limita tu crecimiento, ni te deja en ridículo con tus amistades o personas queridas. No minimiza tus deseos o proyectos. No trata de imponer sus opiniones o deseos encima de los tuyos. No te propone matrimonio por conveniencia, no investiga tus ingresos, contraseñas de cuentas o tarjetas, y menos decide comprar casa o carro antes de casarse como solter@ si ya tienen planes de boda.
Todas estas actitudes reflejan los futuros problemas en el matrimonio y en varias situaciones incluso son constitutivas del delito de violencia familiar en sus diferentes modalidades tanto patrimonial, como emocional, psicológica y hasta física que motivan desde denuncias hasta órdenes de protección y restricción contra el que en un momento fue el amor de tu vida….
Por ello antes de dar el sí y casarte por temor a quedarte sol@ o porque todos tus amig@s ya se casaron, evalúa los pros y contras de tu relación, recuerda que la gente no cambia, empeora y más al considerar que tiene derechos sobre tu persona y tu economía por el matrimonio, peor aún si es por Sociedad Conyugal.
Lic. Claudia T. Witron
Cel. 8110291573
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