El sistema duodecimal es un sistema de numeración en base doce. Cada conjunto de doce unidades de un nivel genera una unidad del siguiente nivel superior.
Desde los antiguos sumerios se utilizaba la base doce por ser una base humana, ya que contados con una mano usando el pulgar a modo de puntero, las falanges de los cuatros dedos sale la cuenta de doce, de manera gráfica una docena son tres falanges por cuatro dedos. Cuando se utilizaba la otra mano como multiplicador de doce por cinco se obtienen sesenta, con lo cual de una manera eficiente y practica con las dos manos se obtiene sesenta o sus cinco docenas, ya que las manos son utilizadas como un ábaco.
En la actualidad se sigue utilizando al dividir el año en doce meses, y el día en doce horas diurnas y doce horas nocturnas, son doce los signos del zodiaco, doce los animales en la astrología china, son doce los apóstoles. De ahí se desprende el sistema sexagesimal (base sesenta), ya que se divide la hora en sesenta minutos y estos a su vez en sesenta segundos.
Inclusive se continúa usando a diario en la cantidad genérica como en la comercialización del huevo de la gallina que se envasa en docena o media docena. La cerveza que se promociona como seis de cerveza o tapa de veinticuatro latas.
Partiendo de lo anteriormente descrito podemos imaginar el uso de un pizarrón a la forma que le gusta explicar al gobernador Samuel García. Estamos en el sexto mes de setenta y dos meses que dura la administración para la cual fue electo. En pocas palabras ya lleva una doceava parte consumida en acciones que no se ve por donde sean benéficas.
Si tomamos en cuenta que está próximo a consumirse media docena (seis meses), más considerando que en el último año de su gobierno (si es que llega) en el 2027, los últimos seis meses (media docena) serán ocupados por la veda electoral en su debido momento más el tiempo que se destina a la entrega recepción para el siguiente periodo gubernamental, el gobernador ya tiene consumido un año con un cero en productividad, eso en una empresa representaría el cese inmediato del empleado y de todo su equipo además de declarar en quiebra la misma.
Basta con dar un simple repaso como lo fue la creación del impuesto verde el cual de inmediato trajo consigo un alza en los materiales de la construcción y una parálisis en ese mismo tema. El área de la seguridad que ha pasado de malo a pésimo al incrementarse los asesinatos por la delincuencia. La sequía que está presente no solo en el área metropolitana, sino también en el área rural lo cual pinta para un escenario sumamente difícil. En el DIF donde inició con pleitos en centros infantiles, sustracción de un infante violando la ley y lo más triste la defunción de un menor que no ha sido aclarado el porqué de tan lamentable asunto, demasiadas simulaciones.
Tan fácil como utilizar los dedos de las manos y hacer cuentas, usted mismo apreciado lector podrá ver como esta administración ha sido un derroche del único recurso no renovable que tenemos en la vida, el tiempo. Independientemente del PRISMA con el que se vea.
Cajón de sastre: Peor aún para los alcaldes en donde su periodo es por solo treinta y seis meses, bajo la misma premisa llevarían consumido ya un tercio de su mandato, lo único que han hecho es gestionar el aumento del predial. Así como a toda acción hay una reacción, habremos de esperar la reacción del ciudadano en la urna en el 2024.
