Es probable que en el PRI de NL se habrá de recurrir a la revolucionaria leva para completar con sus candidaturas en la contienda electoral del 2024.
El anuncio adelantado del dirigente nacional de tricolor, Alejandro Moreno, sobre la declinación de Beatriz Paredes, desencantó a priistas locales.
El proceso del Frente Amplio México lo califican como un simulacro al “tirar la toalla” antes de los sondeos que, originalmente, se conocerían el domingo.
“Alito” la volvió hacer. Piensan que el dirigente usó a Beatriz Paredes, no para salvar al PRI, sino para salvarse él mismo del acoso político del AMLO.
Quien verá complicada su labor es el presidente del CDE del PRI en NL, José Luis Garza Ochoa, para convencer a algunos militantes a ser candidatos.
A menos que recurra a la recordada leva, ese reclutamiento forzoso de gente que se hace para un servicio y así nutrir las filas del priismo el año venidero.
Será el primer domingo de junio del 2024 cuando se elegirán en NL, candidatos para Senadores, Diputados Federales y Locales, alcaldes y Regidores.
Con la coalición PRIAN y PRD podrían recuperar las alcaldías que se perdieron con MORENA e Independientes y retomar las “compradas” por MC.
En diputaciones locales, corre riesgo de perder, sobre todo en las que actuales diputados y diputadas busquen reelegirse luego haber abandonado su Distrito.
El futuro del PRI local está incierto. No se define si “Alito”, aunque dijo “no me tomen en cuenta para presidir la Mesa Directiva del Congreso”, lo acepte.
De no aceptar, están en posibilidades Marcela Guerra e Ildefonso Guajardo. Rásquenle tantito y sabrán quien operaría las candidaturas del PRI local.