Saluditos desde el lugar donde se dice que nació el PRI, General Terán, Nuevo León, en donde está la Hacienda de Calles Presidente y sus descendientes, la Hacienda de la Soledad de la Mota.
Pero el caso es que General Terán, cuna de Los Alegres, tengo buenos amigos y amigas, quienes en el cotorreo ese del Facebook me platican que prefieren platicar así, por Messenger, la mayoría de las veces, porque en persona ya no se aguantan entre ellos.
Y no es que estén peleados, sino que pues no se pueden bañar todos los días, cosa que no pasa por enfermedad alguna, sino que administraciones van y vienen, priistas y panistas, pero ninguno de los alcaldes que ha ido o venido se han preocupado por dar solución a los problemas de abastecimiento de agua y con estos calorones se han quedado sin este vital liquido, por lo que el baño diario sin estar prohibido es casi imposible.
Y eso que casi por en medio del pueblo pasa el Río Pilón.
La pregunta entonces ¿qué se le hace al dinero del municipio? El vital liquido escasea pero en la casa del alcalde no, sus jardines están florecientes y diario se riegan, y al pueblo comoquiera total al rato les hacen una feriecita, les dan chance que se refresquen con una cervecita y no pasa nada, la dinastía Villagómez sigue pa’ delante, inhabilitados o no, ellos seguirán siendo los meros meros petateros de ese pueblo querido, orgullo de los de allá, en donde los hombres por las damas la vida pueden jugar. ¡Ajúaaa!
(¡Pero te bañas cuñao!)
La falta de empleos en esa área citrícola, no es nueva y ha hecho que muchos pero muchos Teranenses hayan emigrado a los Estados Unidos, y aunque mantienen su credencial de votar y existen en la lista nominal, pero vas a medio día y ves el pueblo donde por sus calles solo falta que pasen rodando asquellos arbustos rodantes del desierto. Tétrico.
Pero ni a Ramón, ni a Tello les preocupa buscar la forma de establecer nuevas empresas, que propicien de alguna manera el crecimiento económico del municipio, y provoquen el arraigo de sus habitantes, quienes en el mejor de los casos se vienen a vivir a Monterrey, ante el hambre y la necesidad.
Esa falta de oportunidades ha provocado el desarraigo de los antiguos pobladores lo que causó que las fértiles tierras del lugar se convirtieran en blanco perfecto para que los chicos malos del malévolo Grupo Allende y sus “Villanos Reventones”, buscaran establecer por ahí ranchos chileros, pero con su gente de otras ciudad porque los oriundos de Terán y rancherías, nomás no tienen cabida para la chamba, si no pregúntenle a Rodrigo Medina que encabezó esas inversiones, y aunque “El Bronco” le embargó uno de sus ranchitos dice la raza que no le quitó ni un pelo a los demás que tiene bajo otros nombres.
A mi no me crean pero dicen, y pa’ no batallar con la carretera que dejaron a medias y que tanto se la repartieron en los informes los alcaldes de Montemorelos y Terán pero nunca la acabaron, que Medina y su séquito de socios tejones se iban en el helicóptero por desconfianza al camino y por ma, ma, más razones. No se les fuera a ponchar una llanta.
Pero bueno, en un chance y cambien los aires por esos pueblos de Nuevo León, que tanta atención requieren.
Y ahora sí que es viernes, pásenla chingón, que dice “El Bronco”, arre, a jalar que se ocupa.
